Alguien dijo que si casarse es importante también lo es mantenerse casado. Comenzar una relación de amigos o de pareja para después dejarla morir no es algo lógico. Lo ideal es que la relación una vez establecida se cultive y fortalezca. Por supuesto que eso va a demandar cierto grado de dedicación y compromiso. Lo que ocurre con cualquier relación de pareja o amigo ocurre también en la interacción con Jesús. Es el propósito presentarte algunos puntos importantes que te ayudarán a cultivar y mantener tu relación con Jesús.
Para que un
cristiano alcance madurez y produzca los frutos de fe deseados debe mantener
una relación salvadora con Jesús. El dijo "separados de mí nada podéis
hacer" (Juan 15: 5). Esto quiere decir que un creyente que desea dar buenos
frutos no debe concentrarse en los frutos que quiere dar sino que debe
poner todos sus esfuerzos en desarrollar y sostener un compañerismo
diario con Cristo.
Como Mantener la Comunión con Jesús
Por ejemplo si
quieres tener una relación con alguien a quien amas lo normal y primero es que
busques pasar la mayor cantidad de tiempo posible con esa persona. El
desarrollo de la relación con Jesús está guiado por el mismo principio. Es
necesario pasar tiempo de calidad con él. Esto se puede hacer de muchas maneras.
A continuación te menciono algunas de las más importantes:
- Orando todos los días. “Tarde y mañana y a mediodía oraré y clamaré, Y él oirá mi voz” (Salmos 55: 17).
- Estudiando la Biblia. “Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y diligentemente las enseñarás a tus hijos, y hablarás de ellas cuando te sientes en tu casa y cuando andes por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes.” (Deuteronomio 6:6-8 (LBLA)).
- Reuniéndote con otros creyentes. “Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones.” (Hechos 2:42).
- Hablándole a otros de lo que Dios ha hecho en tu vida. “Más Jesús. . . le dijo: Vete a tu casa, a los tuyos, y cuéntales cuán grandes cosas el Señor ha hecho contigo, y cómo ha tenido misericordia de ti.” (Marcos 5:19).
Cuidar el buen
desarrollo de nuestra relación con Jesucristo debe ser una prioridad en la vida
de todos porque en la medida que la
comunión con él crezca crecerá también la fe, la esperanza, la paz interior y
el sentido del propósito en la vida.
Si has
comenzado una amistad con Jesús te aconsejo que la fortalezcas y si no
has dado lugar a un compañerismo tal entonces te invito a que hoy mismo la
comiences. Nada traerá más bienestar a tu vida y a tu familia que la constante
presencia de Cristo.
Repite en silencio:
Señor vengo a
ti con el deseo de conocerte y establecer una relación amistosa contigo. Ven a
mi vida. Bendice mi hogar, mi trabajo. Condúceme a través de estos tiempos
difíciles. Lléname con tu paz. En el nombre de Jesús, Amen.Si te gustó este artículo, por favor, dale Like, compártelo y deja un comentario. De esa forma beneficiarás a otros y darás apoyo a nuestro ministerio.
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